Cada otoño, millones de personas en la India y en todo el mundo celebran Diwali, conocido como el Festival de las Luces. Esta tradición ancestral marca el triunfo de la luz sobre la oscuridad, del bien sobre el mal y de la esperanza sobre la desesperanza. Durante cinco días, las casas se llenan de lámparas, colores y aromas; se intercambian dulces y se agradece por la abundancia recibida, pidiendo también claridad y protección para el nuevo ciclo. Más allá de la religión, Diwali es una invitación a recordar que cada ser humano porta una luz interior capaz de disipar la sombra.

Este año puedes vivir ese espíritu sin salir de casa. La recomendación más sencilla y poderosa es encender una vela o lámpara en un lugar especial de tu hogar, cerrar los ojos y, en silencio, entregarle todo aquello que ya no necesitas: preocupaciones, culpas, miedos o hábitos que pesan. Al hacerlo, visualiza cómo esa luz los transforma en aprendizaje y espacio nuevo para la paz, la abundancia y los sueños que quieres manifestar. Diwali nos recuerda que cada chispa de luz, por pequeña que parezca, tiene la fuerza de renovar toda una vida